Desde que tengo uso de razón me recuerdo deseando tener hijos. Quería tener hijos, con o sin pareja, pero tenía claro que quería ser madre. No sé por qué, pero era así.Pronto pensé en adoptar. ¿Que por qué? pues porque sí, no sé, no tenía una razón o las tenía todas, según cómo lo mires. Todo estaba claro, si hay una personita que necesita una familia que le quiera y le cuide correctamente y yo puedo atenderle… ¡se cae de cajón! ¿no? ¡Yo lo veía y lo sigo viendo tan claro! Es imposible para mí no intentar dar amor a quien lo necesite. ¿Cómo no voy a poder querer a cualquier niño o niña que necesite ser atendido?
Para mí es lo natural, no hay otra opción. ¿Bondad o egoísmo? ¿y yo qué sé?Como hay que explicarlo todo y todo tiene que tener una razón de ser… Hay gente que opinará que soy un alma caritativa, que piensa en los demás, otros que me encanta que me valoren, otros que soy feliz sintiéndome útil y mil cosas por el estilo. Habrá quienes pensarán que soy una egoísta, que lo único que busco es que me quieran e incluso que les quiero quitar el privilegio de tener un hijo “normal” a aquellas personas que no pueden tenerlos biológicamente, porque yo sí los tengo.Y yo solo sé que no lo sé explicar mejor, que no es ni una cosa ni otra, que simplemente para mí la vida es así: compartir lo bueno y lo malo, dar y recibir, amar, vivir.y también esto:
A NUESTRO FUTURO HIJO ADOPTADO (O HIJA, O HIJOS, O HIJAS):
Toda la familia estamos esperándote con los brazos abiertos.
Tenemos tantas ganas de conocerte
y de compartir todo nuestro amor…
No sabemos si serás tú, o seréis vosotros,
no sabemos edad, ni sexo, ni raza…
no sabemos nada de eso,
pero lo que sí sabemos es que ya te queremos u os queremos,
porque ya formas o formáis parte de esta familia.
Me alegro mucho Anaís!!! disfruta a tope…un fuerte abrazo
Es genial lo que le dedicas a vuestro futuro hijo/a adoptado.
Gracias por vuestros comentarios.