Qué bonito mundo el de los payasos y payasas,
con tanta ingenuidad y torpeza, tan simples.
Con sus emociones a flor de piel…
viviendo con autenticidad, espontáneamente…
nos transmiten tantos sentimientos…
que disfrutar con su presencia es tan sencillo como respirar.
Si todo el mundo sacara y compartiera
su payaso o payasa interior
el mundo sería más humano,
quiero decir, más payaso, o sea,
mucho mejor de lo que es.
Gracias Pirueta por todo lo que me das.
Y gracias a ti, por lo que nos das a nosotros.
Precioso Anaís, un abraso payaso ;D
Si cada uno dedicase un poquito de su tiempo en echar una mano a los demás, haciendo tareas de voluntariado, sin pedir nada a cambio, sólo por el placer de ayudar…el mundo sería un sitio maravilloso donde vivir.Un beso.