Cuando estás tratando de mantener tu vibración elevada, ¿te pasa a veces que tu energía cambia drásticamente sin saber muy bien por qué? Resulta que te sentías estupendamente y, de pronto, tu energía es negativa…

¿Sabes de qué te estoy hablando? Porque si es así te interesa lo que voy a contarte. En primer lugar, vamos a ver algunas posibles causas de que se produzca ese cambio en la vibración, para que puedas detectarlas:

  • Los acontecimientos

Cuando acontece algo que nos afecta cambia nuestra vibración, y si lo que está pasando nos produce dolor físico y/o emocional, nos baja la energía vital.

La cuestión en estos casos es ser conscientes de que esto sucede, darnos el permiso para sentirnos como nos sentimos (y el tiempo necesario para ello), y después hacer algo que vuelva a elevar nuestra vibración.

  • La compañía

A menudo nos impregnamos de la energía negativa con la que vibran las personas que nos rodean y a lo que nos damos cuenta nos hemos convertido otra vez en un miembro más del conjunto que vibra bajo. Cuidado porque esto es muy importante, cuando notes que tu energía está cambiando, observa a la gente que hay a tu alrededor.

¿Hay alegría?, ¿hay sonrisas?, ¿hay risas?, ¿hay ilusión?, ¿hay esperanza?, ¿hay noticias positivas?… Genial, sigue ahí el tiempo que te apetezca, porque seguramente tu vibración estará cambiando por otra causa.

Pero si, por el contrario, hay crítica, quejas, malas caras, victimismo y noticias negativas… ¡No entres al trapo!, no participes de ello y sal de ahí cuanto antes para no contagiarte. Y si no puedes distanciarte físicamente en ese momento, hazlo mentalmente, ya que para un rato te servirá.

  • Los pensamientos

Muchas veces son nuestros propios pensamientos los que nos mantienen en baja vibración, porque si estamos pensando en algo que nos preocupa, dándole vueltas a las cosas en la cabeza, etc., la vibración baja.

Por lo tanto, en cuanto te percates de que lo que estás pensando no te permite vibrar alto, dile a tu mente que no quieres seguir pensando en eso y trae pensamientos positivos a tu cabeza lo antes posible.

  • Los hábitos

Nuestros hábitos influyen muchísimo en la forma en que vibramos. Recuerda que un hábito es algo que se repite continuamente en el tiempo, así que si tenemos alguno que baja nuestra vibración y no lo cambiamos, cada vez que lo repetimos volvemos a vibrar bajo.

Por eso, si quieres vibrar alto, es necesario que detectes los hábitos de baja vibración que tienes y los saques de tu vida.

elevar vibración

De cualquier forma, sea lo que sea lo que haya hecho bajar tu vibración, te recomiendo que en cuanto te des cuenta, tomes acción rápidamente y hagas algo para elevarla de nuevo. Y no esperes a que te apetezca, hazlo ya, porque cuanto más tiempo permanezcas vibrando bajo, más te costará subir tu energía.

Hay muchas formas de elevar la vibración, ya que básicamente todo aquello con lo que disfrutamos lo hace, pero yo te propongo estas 5 opciones porque a mí me encantan y son fáciles de llevar a cabo:

1- Pasea. Sal a caminar (preferiblemente por un espacio natural), de esta forma se activará tu cuerpo, se relajará tu mente y subirá tu vibración.

2- Ríe. Encuentra la forma de reírte, porque unas buenas carcajadas elevan la vibración instantáneamente.

3- Baila. Mueve tu cuerpo libremente al ritmo de una música que te guste y observa lo rápido que cambia tu estado de ánimo.

4- Canta. Con música o sin ella, tanto con habilidades cantarinas como si cantas fatal, da igual, tú disfruta cantando y ya verás qué bien te sientes.

5- Queda con quien tú ya sabes. Me refiero a esa persona con la que disfrutas tanto y cada vez que compartes con ella te sientes tan estupendamente bien, ¿de acuerdo? Pasa tiempo disfrutando de su compañía y vibraréis alto.

Y recuerda que, si tú quieres, yo te espero por aquí y entre las páginas de mis libros, con más contenido que puede ayudarte a elevar tu vibración disfrutando cada día más de La Alegría de Vivir

 
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