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“Dicen que a buen entendedor pocas palabras bastan, pero yo creo que en el tendedor, sea bueno o malo, no se ponen palabras, sino pinzas... al menos yo lo hago así... y palabras... pues igual con mi vecina, cuando tendemos aprovechamos para hablar unas cuantas...

“La corriente va, la corriente viene, sigue la corriente, no, no la sigas, que se te lleva... ¿a dónde se me lleva? pues ahora me enfado, a mí no se me lleva nadie y si hace falta me subo y me bajo de la corriente cuando yo quiera... ¡faltaría más!” “Oye, oigan,...

“oe, oe, oe, oe... ¿voy bien? creo que se dice así, es para estar de celebración...” “si cuando las cosas van mal, todavía pueden ir a peor es porque no van mal del todo, vamos, digo yo... porque si fueran mal del todo, todo... ya no podrían ser peor... así que...

  “¡qué cosas pasan en la vida! esto es un ir y venir p'aquí, p'allá... estamos aquí porque antes estuvimos allá y luego estaremos en ese otro allá porque venimos de acá, pero siempre estamos donde estamos... yo siempre estoy aquí, pero otros dicen que también...

“Pues aquí estoy, ¿y tú estás? ESTAR O NO ESTAR, HE AQUÍ LA CUESTION” “Solo sé que no sé si sé o no sé, quizás algo sepa, hay cosas que sí que las sé, pero otras, como no sé si son o no son, pues no sé bien si las sé o no las sé ¿quién sabe?” “El mundo está...

“Me voy, me voy, me voy de cursoooo, con amiguetes y amigotas, ¡qué contenta estoyyy!” “Ya he vuelto, he trabajao, he jugao, hubo un momento que me poseyó una voz extraña que no sé cómo ha sido, impresionadísima me quedé... creo que he conseguido esorcincharla, menos...